Nuevo León coloca primer brazalete a ladrón de negocio
Contraportada // Redacción
Autoridades de Nuevo León colocaron este viernes el primer brazalete electrónico como medida cautelar a un acusado en la entidad.
De esta forma se presentó la colocación de brazaletes electrónicos a las autoridades del Poder Judicial, Fiscalía General de Justicia y Defensoría Pública, como parte del Sistema Penitenciario en el Estado, los cuales estarán monitoreados en tiempo real las 24 horas del día.
El dispositivo se coloca en el tobillo de un acusado, en este primer caso, del delito de robo a una tienda de conveniencia, y así impedir que evada la acción de la justicia.
Bernardo González Garza, titular de la Secretaría de Seguridad Pública, señaló que se cuenta con equipos de monitoreo y geolocalización que estarán vigilados a través del Centro de Coordinación Integral, de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo del Estado (C-5), además de la Unidad de Medidas Cautelares y Suspensión Condicional del Proceso.
“Este sistema y este brazalete cuenta con una fibra óptica que permite ser detectado si es que se quisiera manipular por la propia persona que porta el brazalete, también la batería que tiene un sensor que le avisa a la persona que lo porta para que acuda a cargarlo y nos avisa a nosotros (a la Secretaría de Seguridad Pública) si esta persona está violando la medida cautelar”, explicó.
El funcionario añadió que el dispositivo, el cual llega a soportar temperaturas extremas y puede sumergirse en agua, evitará que el usuario abandone el perímetro permitido por el Juez de Control, pues de hacerlo, será sancionado.
La asignación de este dispositivo de monitoreo y geolocalización será determinada por el juez de la causa y serán aptas aquellas personas que cuenten con una o varias medidas cautelares como la prohibición de salir sin autorización del país, de la localidad en la cual reside o del ámbito territorial que fije el juzgador.
Además, se podrá controlar los lugares que visita en caso de prohibir la comunicación con determinadas personas como las víctimas y testigos, siempre que esto no afecte el derecho de defensa.
El primer brazalete electrónico se le impuso a Héctor Ernesto “N”, acusado del delito de robo a un Oxxo.